El Instituto Costarricense de Electricidad pretende tener cubierto todo el país con estaciones de carga para vehículos eléctricos el próximo año con la instalación de 28 estaciones. Actualmente hay alrededor de unas 37 “electrolineras” o estaciones de servicio distribuidas en distintas zonas del Área Metropolitana.
El proyecto forma parte de una meta trazada para impulsar el uso de vehículos eléctricos en el país, y con la intención de ver cambios sustanciales en la movilidad urbana en el término de tres años.
Uno de los retos a los que se enfrentan es el de cambiar la forma en que se pagan impuestos por la adquisición de vehículos eléctricos, en países más avanzados opera la fórmula de que el que contamina paga; es decir, los carros que se mueven mediante combustibles fósiles deberían pagar más que aquellos que no contaminan.
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